Acapulco ¿Autoridad o Complacencia económica?
En diversas ocasiones, personas de apellido Luna Sánchez, miembros de una familia en el puerto de Acapulco enfundados en una “representacion sindical”, a veces usando las siglas de la CROC y en otras las de la CTM han gestionado huelgas y paros con el objeto de poder facturar trabajos de acarreo y venta de materiales. Este ánimo corsario y comercial ya ha causado serios inconvenientes a la de por sí maltrecha economía de Guerrero y en especial a la de Acapulco, pues además de usar la gestión sindical para forzar a diversas constructoras, han terminado invariablemente usando su “representación” para cobrar de más, reventando los presupuestos y ánimos de constructoras que intentan ejecutar trabajos en el Estado con pretextos tan diversos como: “faltas de pago, pago de tiempos muertos por sobrecarga extraordinaria” o extorsionando de plano a empresas bloqueando obras para que las que lleguen paguen adeudos oníricos con el apoyo de autoridades como la mismísima Secretaria de Gobernación, quien en representación de su Director decide qué contrato es válido y cómo.
Es indiscutible que los derechos de los trabajadores son fundamentales, sin embargo estas personas siempre han esgrimido conflictos para cobrar de manera extraordinaria derechos que nunca acaban en los bolsillos de trabajadores ni en las manos del fisco, su modus operandi abarca la creación de titularidades de contratos de obra que son inexistentes y que nunca se existieron en licitación pública con el apoyo extraño y curioso de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje y argumentan la falta de representación por el solo hecho de no ser ellos los titulares de los contratos colectivos.
ICA, Grupo Carso, Isolux y Assignia, son algunas de las empresas que han tenido que lidiar con diversas situaciones “sindicales” y pareciera que con la complacencia de las autoridades en el Puerto, la pregunta es ¿cuánto tiempo más regirá tanta irregularidad que sumada ha causado enormes estragos en la economía de Guerrero? ¿tendremos autoridades comprometidas con los trabajadores y no con los bolsillos de terceros?
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